Valero Media nació hace 10 años como un portfolio personal, una plataforma en la cual mostrar los proyectos que llevaba a cabo en aquella época. Al finalizar los estudios de “Realización Audiovisual” y tras las prácticas en una televisión local, centré mi trabajo en la producción audiovisual.
Dos años más tarde decidí especializarme más en la parte final del proceso, así que cursé un Master en ‘Creación de Efectos Digitales’ . Al terminar, pude confirmar algo que ya sabía. ¡Por fin! Había encontrado mi vocación. Así que decidí centrar todo mi esfuerzo y talento en la post-producción audiovisual y la creación de efectos visuales o VFX.
La especialización, o mejor dicho, la hiper-especialización a la cual estamos sujetos los autónomos o freelance, exige conocer al público al que nos dirigimos. Amoldar nuestra propuesta de negocio y de servicios a un nicho de mercado más concreto, nos permite centrarnos en conocer y escuchar a nuestro cliente ideal. Esta parte es muy importante. Saber cuales son sus necesidades, los problemas a los que se enfrenta. Cuanto más conozcas a tu cliente ideal, o buyer, mejor podrás fijar tu estrategia de marketing y ventas. Quizá este sea el punto más complicado llevar a cabo. Determinar, acotar, y establecer cual es mi cliente potencial no es tarea fácil, pero es imprescindible para poner en marcha una propuesta de negocio.
Soy de esas personas que piensa que las cosas se pueden hacer de dos formas: bien o mal. Y está claro que para que las cosas se hagan bien hace falta tiempo, dedicación y constancia.
Valero Media inicia en 2019 una nueva etapa, en la cual su carta de presentación son la calidad de la imagen, la creatividad de sus proyectos y la originalidad de sus propuestas. Poniendo a disposición del cliente un universo de soluciones visuales adaptadas a los nuevos tiempos. Además, gracias a las nuevas herramientas adquiridas en creación digital, Valero Media no solo captura la realidad, sino que la reinterpreta o la mejora en función del cliente, ofreciendo una imagen mejorada de su producto.
Creación del logotipo

Uno de los objetivos que se perseguían a la hora de crear la nueva imagen de Valero Media era dotar al logotipo de personalidad, así como una serie de características que en el anterior logo no estaban presentes, y que en el nuevo debían quedar remarcadas. El vídeo, al contrario que la fotografía, es movimiento, dinamismo, estímulo. El nuevo logotipo no podía ser estático, debía despertar dinamismo, emoción y en definitiva vida.
Partiendo del anagrama original y basándonos en la proporción áurea, construimos el nuevo isotipo, tomando este patrón como referente para la ubicación de los distintos elementos que lo forman. El isotipo es un ojo despierto, curioso, que se mueve y al que le ocurren cosas.
El diseño original del logo se llevó a cabo en 2D, a una tinta, y posteriormente se trasladó a 3D dotando de volumen al logo. Una anécdota curiosa ocurrió durante los ajustes de especularidad y luminosidad, y fué la aparición del reflejo de la tipografía en el isotipo, provocando lo que se denomina pareidolia (fenómeno psicológico donde un estímulo vago y aleatorio es percibido erróneamente como una forma reconocible), en este caso un tierno gesto. ¡El logotipo nos devolvía la sonrisa! De alguna manera, me sentí como Geppetto dando vida a mi particular Pinocho.
Tipografía y color

En el caso de la tipografía, para continuar con las proporciones áureas se utilizó la Sucesión de Fibonacci, manteniendo las mismas proporciones 55/34, dotando al logotipo final de equilibrio y cuerpo.
Gracias a la tipografía podemos reforzar ciertos rasgos que nos definan. Por ejemplo, en mi caso, utilizo la tipografía de Oduda, ya que ésta posee unos rasgos amigables, extrovertidos y alegres, creados por el diseñador holandés Thom Niessink. Es la tipografía perfecta para transmitir connotaciones amigables y juveniles en contextos distentidos.
Los colores “transmiten”, y en este caso se ha renunciado a la paleta de colores original. Se reajustaron los colores corporativos en función a los rasgos y valores que pretende trasmitir el nuevo logotipo. Se apostó por la utilización del azul oscuro, el verde y el blanco beis. El color corporativo es el verde, pero, no es un verde puro, es la fusión del tradicional “verde chroma” y un tanto por ciento de amarillo. El amarillo es un color vital, enérgico y joven.
Logotipo y web responsive

Una de las cosas más claras que tenía, era que la web debía ser visualmente llamativa, vistosa, que captara la atención al igual que el logotipo. Todo tenia qué ser responsive o rescalable, guardar una coherencia y estética. Una aplicación rigurosa del manual de identidad visual garantizó que la pagina web siguiera en esta misma linea. Además de todo esto, la web tenia que ser eficiente, cargar rápido el contenido y adaptarse a los diferentes dispositivos donde se vaya a visualizar.
Se diseñó y adaptó la web, visualizando el resultado final en un ordenador, una tablet y un smartphone al mismo tiempo. El logotipo, al igual que la web, debía adapatarse a los diferentes dispositivo, y también a los perfiles en redes sociales.